Hasta ahora el mundo del cine y el de la fotografía no se habían encontrado ni en los fotogramas (uno corría vertical y el otro horizontal). A mí siempre me ha gustado definir al Director de Fotografía coma un Fotógrafo en movimiento y me ha atraído pensar en la planificación de la iluminación del primero para que los personajes siempre estén bien iluminados aun en movimiento. Y hablando de iluminación, que es donde se distinguen los trabajos de cada uno en sus respectivos oficios, vamos a buscar un proyector de iluminación que sea un factor común entre ambos mundos. Briese es el punto de confluencia.
Briese es una marca alemana de alta calidad que lleva el nombre de su fundador, fotógrafo de moda, ingeniero y emprendedor; con la frase «podemos hacerlo mejor» queda definido el producto que nos vamos a encontrar, con calidad, precisión y… precio; debemos tenerlo claro, la calidad se paga y es una inversión que se amortiza a largo plazo, dado que es un producto que nos acompañará durante muchos años dando servicio como el primer día. El Sr.Briese no encontraba la luz perfecta que él deseaba para sus fotografías y así es como desarrolló y patentó su propio reflector, un reflector con una fuente de luz que se desplazaba por su eje; el reflector focalizable había nacido. Desde ese momento la luz de estudio se convirtió como la luz del Sol, pero ajustable. Su invento hacía que sus fotos fuesen únicas hasta que empezó a vender sus proyectores Briese a otros fotógrafos de primer nivel; hoy en día aun se reconoce la marca en el sector de la fotografía y el cine por sus luz individual y de alta calidad. Su secreto, la luz envolvente.
Con su último invento, el E-Focus, el control remoto de foco, podemos controlar hasta ocho unidades desde la posición de cámara para una precisión perfecta de la atmósfera de la luz. Imaginemos que podemos controlar la luz del Sol y tenemos las sombras bajo nuestro dominio, con Briese es una realidad. Volvamos al inicio, al punto de confluencia entre el cine y la fotografía, en este caso dentro del entorno de la moda y la publicidad; Briese tiene patentado el sistema del reflector y su fuente de luz móvil por el eje del primero, pero esta fuente puede ser flash, incandescencia o HMI. Estas tres opciones de fuentes de luz sobre un mismo sistema de reflector permite elegir en cada momento a qué y a quién va destinado el proyector. Muchos compararéis el sistema de Briese con una caja de luz difusa octogonal que utilizan varios fabricantes, pero es algo diferente dado que estos últimos ponen un difusor delante y lo acercan o alejan del modelo, nada más. La caja de luz ó reflector de Briese cambia la dureza de la luz moviendo la lámpara por su eje, y como he dicho antes, modulando la atmósfera de la luz con precisión.
Evidentemente la base de Briese es el reflector y no tiene sólo un modelo, hoy en días tenemos varios tamaños a vuestra disposición, nueve para incandescencia y HMI, y uno más para flash. Los nueve reflectores de cine van desde el diámetro de 77cm hasta el enorme de 330cm, mientras que para fotografía se añade uno más de 44cm. Cuando mayor es el reflector, mayor es la potencia que acepta, siendo las cabezas o fuentes de luz para lámparas desde 1950W hasta 5000W para incandescencia, 1200W hasta 6000W para HMI y 6400W hasta 12800W para flash. Todo un mundo a vuestra disposición.
Para acabar os dejo el enlace a estos tres vídeos de presentación de los productos Briese.
Alfons Grau – Director Gerente de Grau Luminotecnia
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